Postnatal de emergencia
Lina Córdova Mangili
Desde que se decretó la pandemia por Covid 19 en Chile y el mundo, sin duda que la forma de nuestra vida ha cambiado en todos los sentidos. Nos afecta a todas/os, pero sin duda que no nos afecta por igual. En este sentido, según datos de la OMS, las mujeres están más expuestas a contraer el virus, en su mayoría las que trabajan en los hospitales, debiendo enfrentar una mayor pérdida en el empleo y altos niveles de exposición a la violencia, siendo junto a las/os niñas/os los grupos más excluidos de políticas públicas para su protección. Según datos del Minsal, al 1° de noviembre había 57.375 casos de Coronavirus confirmados en menores de 18 años de ellas/os, de los cuales 1.739 han sido hospitalizados en todo el país, 58 de ellos con ventilación mecánica. Además, el reporte da cuenta de 48 menores fallecidos. El informe, además, detalla 4.113 casos en menores de un año, de los cuales 2.482 tenían menos de seis meses. De estos últimos, 423 se infectaron siendo recién nacidos, antes de cumplir 28 días.
En resumen, sabemos que las/os niñas/os, además de poder transmitir el virus, también se enferman y pueden desarrollar cuadros graves ante el Covid 19, los que incluyen síndrome inflamatorio multisistémico y la muerte.
A principios de la pandemia, los centros de Cuidado infantil fueron cerrados por la autoridad. Sin embargo, en la actualidad el Minsal considera que es posible la reapertura de éstos en etapa 2 del plan “Paso a paso”. Situación compleja si pensamos que las/os niñas/os no son capaces de cumplir con protocolos impuestos de Covid, ya que sus juegos para el desarrollo cognitivo y social no conocen de distancia física o lavado de manos y desinfección, a lo que se suma la necesidad de ser consoladas/os por un adulto cuando se presenta algún contratiempo.
Las mujeres en Chile han levantado sus demandas y se han articulado para tejer una red de protección en torno a ellas y sus hijes. Como Confedeprus, que representamos a las/os profesionales de la Salud -la mayoría mujeres-, hemos sido parte de esta red aportando en cada lucha, incluyendo el Postnatal de emergencia, lo que dio sus frutos con la aprobación de la ley 21.247 tras una lenta tramitación que no estuvo exenta de polémica, y que como gremio junto a la presión de varias organizaciones sociales pudimos hacer que se promulgase a finales de Julio del año 2020, a pesar de la poca voluntad del gobierno. Esta ley contenía la regulación de una licencia médica preventiva parental de 30 días renovable por dos veces, con tope de 90 días y la suspensión del contrato de trabajo, a la cual sólo pueden acceder trabajadoras/es del sector privad0.
Todo lo anterior resulta absolutamente insuficiente ante el escenario de pandemia que seguimos viviendo, situación que a pesar del inicio de la vacunación no cambiará al corto plazo, según los expertos y el propio ministro Paris. Es por esto que nuestro gremio, articulado con la Vicepresidencia de la CUT, la Coordinadora del Postnatal de Emergencia, el Colegio de Matronas y Matrones de Chile y otras organizaciones sociales, hemos solicitado la extensión de este beneficio hasta el final del Estado de Excepción. Sin embargo, nuevamente el gobierno entrega una propuesta que arriesga las vidas de les niñes, con el objetivo de reactivar la economía, la que consiste en que las madres y adultos a cargo del cuidado deben volver a trabajar a cambio de un bono de $200.000, quedando sus hijes bajo la supervisión en sus casas de personas ajenas, lo que significa sin duda un riesgo para su salud y sus vidas.
Ante esto, Confedeprus considera absolutamente cruel que en la actualidad las madres deban elegir entre la salud de sus hijes y mantener sus ingresos. Creemos que el bien superior de las/os niñas/os debe primar siempre y hacemos un llamado para seguir trabajando en la necesaria extensión del postnatal hasta el término del Estado de Excepción.
Las opiniones aquí vertidas son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no necesariamente representan el pensamiento de nuestra confederación.